miércoles, 21 de abril de 2010

Lenin y los lápices

Leí el otro día
que Lenin
tenía la manía de mantener
siempre sus lápices perfectamente afilados
trinchantes puntiagudos como escalpelos
y Pulcramente
Ordenados en su escritorio.

Puede parecer banal
o incluso un comportamiento neurótico,
sí.

Pero con esos lápices
Lenin escribió la que fue
la Revolución más grande de todos los tiempos:
escribió los discursos,
los libros,
las órdenes,
los acuerdos los planes las reflexiones.

Y luego los desheredados
a golpe de hoz y de fusil
aquella vez y por un tiempo al menos
asaltaron los cielos,
sí.

Es evidente que sus lápices
estaban tremendamente afilados
y

Puede parecer pueril,
sí,
pero ahora yo
desde que sé esto
Mantengo mis lápices
bien afilados siempre.

5 comentarios:

  1. Hay que estar alerta.

    Buen poema.

    Saludos.

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  2. Los lápices.

    y las miradas.



    me ha gustado..


    saludos

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  3. Te devuelvo los saludos desde la trinchera de Logroño compañero.

    Este poema me ha gustado, bastante.

    Mis lápices están afilados también y preparados para dibujar con maestría el rojo amanecer que vendrá.

    Salud.

    PD: no tienes cuadro de seguidores?

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  4. Gracias por los comentarios.

    No sé lo que es un cuadro de seguidores...

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