lunes, 14 de septiembre de 2009

Evo Morales en Leganés: un ejemplo de dignidad y justicia

Leganés. Cinco de la tarde. Una multitud de varios miles de personas hace cola, serpenteando en las inmediaciones de La Cubierta. Sorprende el colorido: banderas indígenas con más colores que las de todos los países europeos juntas; la enseña boliviana; imágenes del Che Guevara y de Evo Morales. También algunas hoces y martillos sobre fondo rojo, y el naranja de un partido humanista. Aquí se come, se bebe y se respira Bolivia.



El ambiente es de impaciencia y de ilusión. Una madre se nos acerca con su hijo; es mi impresión que tiene acento chileno, o quizás argentino. Puede que me equivoque. Le pregunta con algo de timidez a mi amigo: "Perdoná, ¿me dejás ver tu camiseta?" "Claro", contesta el aludido, sacando pecho, levemente confundido. La madre le dice a su hijo (que tendrá unos cinco años) "¿Sabés quién es ese?" El niño se queda mirando la camiseta, cohibido. Le da vergüenza la situación. Pero levanta la vista y dice: "Es Salvador, es Allende". Sonríe. La madre nos da las gracias. Miro a mi amigo; estamos sorprendidos.

Pero la sorpresa grande viene cuando por fin entramos a La Cubierta. ¿Cuánta gente? ¿Cinco mil? ¿Siete mil? ¿Diez mil? Me inclino por la última cifra, y sigue entrando gente. Todo el mundo agita banderas de Bolivia y enseñas indígenas. De cuando en cuando, se arranca el gentío con un grito gutural, de Universo: "Evo, Evo, Evo".

Comienza la fiesta, con bailes y ceremonias de indígenas de Bolivia. Pero también han venido del Perú, de Ecuador; las tradiciones del altiplano andino están presentes. Vestidos de todas las facturas, instrumentos exóticos y sonidos extraños para nosotros, los europeos.
Tras casi tres horas de espera, entre música, aplausos y danzas, aparece Evo. Es pequeño, se le ve pequeño desde las gradas, pero es un gigante. La concurrencia se levanta toda de golpe. “Evo, amigo, el pueblo está contigo “. Miles de voces a una. El ambiente se electriza.

El discurso de Evo es tremendo, es fuerza. Es cierto que no se expresa muy bien, a veces; ciertas frases oscuras, algunas faltas gramaticales. Pero claro, él no tiene estudios. Empezó a trabajar en el campo con seis años, aunque se las arregló para ir al colegio hasta los quince. Y sí, no se expresa con total corrección. Pero su discurso es imponente. Ahora soy yo el que se siente pequeño ante él. Vibra el ambiente.
Dice que ha comenzado una nueva época de dignidad para Bolivia. Dice que por fin Bolivia es de los bolivianos, y no de la corrupta oligarquía. Dice que, ahora, los recursos naturales son del pueblo boliviano. Dice que por primera vez desde 1940, y gracias a la nacionalización de los hidrocarburos, el país tiene superávit fiscal. Se queda en silencio de vez en cuando; parece que le falten las palabras. Pero sigue y afirma que los campesinos, los obreros, los mineros, lucharon siempre. “En las décadas de los sesenta y los setenta”, afirma, “decían que esos sindicalistas, esos mineros, eran comunistas, socialistas. Y los perseguían y los encarcelaban”. Aplausos. “Luego, en los ochenta y noventa, cuando yo estaba en la lucha sindical, éramos narcotraficantes. Y nos perseguían también”. Más aplausos. “Y luego” continúa, “luego dijeron de nosotros que éramos terroristas. Pero sólo somos la lucha del pueblo boliviano”.
Los aplausos no le dejan hablar cuando afirma que no habrá más bases militares estadounidenses en Bolivia. “ En Latinoamérica, donde hay una base militar de Estados Unidos, hay golpes militares", asegura. La multitud grita y canta: “Fuera los yankees de América Latina”. Las miles de gargantas suenan ahora imperativas: es una orden.


Evo habla de la balanza comercial -positiva por primera vez en decenios-, del cambio de mentalidad en Bolivia, del respeto a los pueblos originarios. Habla también de educación gratuita y de calidad, de asistencia sanitaria para toda la gente. “No necesitamos funcionarios en Bolivia; necesitamos revolucionarios al servicio del pueblo”.
Se le ahoga la voz en una avalancha de aplausos. Parece que La Cubierta se va a caer, de tanto aplauso. Es como si un puño de enorme dignidad golpeara la plaza de toros.




“Evo, amigo, el pueblo está contigo”.



9 comentarios:

  1. Amable Román García Quintana14 de septiembre de 2009, 7:21

    Señor Amador Cea, es usted un gigante, también lo es el Señor Evo Morales y todos aquellos que siguen la misma linea que el sigue, es decir, la emancipación nacional, independencia y DIGNIDAD de las naciones Y PUEBLOS Latinoamericanas, por cientos de años pisoteados, robados, expoliados y ultrajados por españoles primero y por yankees despues, aunque justo es reconocerlo, cada vez menos gracias a la conciencia evolutiva que van experimentado las personas y que ha desembocado en los gobiernos actuales del SEÑOR EVO MORALES, EL SEÑOR LUGO, EL SEÑOR LULA, EL SEÑOR HUGO CHAVEZ, EL SEÑOR RAFAEL CORREA, LA SEÑORA CRISTINA FERNANDEZ... y esperemos que otras naciones del entorno en funcion de la determinacion de sus votantes hagan avanzar esta corriente de DIGNIDAD CRECIENTE que no va a parar ningún goriletti, o gringo desfasado por mas que se empeñen en ello. En cuanto a goriletti lo comparo con anastacio zomoza ...en todo, sino al tiempo.

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  2. He buscado en la Wiki información sobre "Evo" que no conocía. Su historia es bastante increíble... (antes de ser político trabajó de ladrillero, de panadero y de trompetero!). Me parece bien que le soporte mucha gente, y no solo los Bolivianos. Hace falta gente como el a veces para cambiar las cosas... (Samabe)

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  3. Muchas gracias por los comentarios. ¡Y gracias por leer el artículo! :)

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  5. Si, claro. Asi de digno se vive ahora en cuba or zimbawe or la CCCP, Alemania y berlin del este, Polonia comunista.. Pisoteados y explotados (y asesinados) por el gobierno-por el estado.. Comunistas tan simpaticos como Ceauşescu que cuando vio el primer modelo Dacia (un renault desfasado)que tenia solo radio y calafaccion para los asientos traseros dijo a los gerentes que era "demasiado lujoso para los estupidos (pueblo claro)" - aunque los estupidos nunca supieron esto.... (ni ustedes).

    Que mas hay que decir cuando se nacionalizo PEMEX y salvar los obreos de la Wexplotacion capitalistaW de salarios bajos...al final la grandes perdidas llevaron a PEMEX a BAJAR los salarios y no se pagaron debidamente las horas extras .... y hablando de horas extras...El gran heroe Hugito Chavez quejandose en la television de que el camara cobraba horas extras el domingo y quejandose de los sindicatos!!

    En vista de que SI he conocido la explotacion comunista... la "capitalista" es mucho, pero mucho mejor "explotacion". Ademas, tengo la posibilidad de ser capitalista como, por ejemplo Richard Brandson que empezo vendiendo discos desde el maletero de su coche (podria haberse hecho funcionario). o como no..el mismisimo Bill gates que empezo no siendo tan pobre pero en su empresa hasta las secretarias son millonarias...o que decir de aquel "negrito" en texas que su madre siendo secretaria de HP compro acciones en la empresa (a descuento y incentivos) y cuando murio dejo a su hijo mas de 100 millones en acciones. No creo que la secretaria de morales puede dejar ni el 1% (sin robar) a sus hijos....

    Hace unos 200 años se dijo de los politicos lo siguiente

    "el peor enemigo del pueblo son los politicos y los criminales"

    "colgamos a los ladrones de poca monta y les damos altos cargos a los grandes"

    "Se dice que el hombre no puede gobernarse a si mismo, pero entonces como pretenden gobernar a los demas...es que son angeles en forma de reyes (tiranos)"

    Lo graciso es decir que el socialismo/comunismo es libertad cuando es obviamente todo lo contrario. Es el estado, la ideologia y el partido por encima de todo. Es no es libertad es servidumbre.

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  6. Bueno, señor Karl (supongo que no será por Karl Marx, pero en fin). Qué puedo decirle que usted no sepa. A los fanáticos como usted no se les puede convencer. Yo escribo un artículo elogiando a Morales, Presidente legítimo de todos los bolivianos y primer (el primero, en doscientos años, que se dice pronto), primer, digo, indígena sudamericano que llega a la presidencia en toda la historia del continente (¿Cómo puede ser?)y usted emprende una ridícula carga contra el socialismo.

    Me entristece. Yo no digo que el socialismo sea una varita mágica que solucione los problemas. Pero no me negará que el mundo en el que vivimos en los países europeos le debe mucho al socialismo. También al liberalismo; no lo neguemos. Pero de no ser por las ideas socialistas, por la lucha de tantos y tantos trabajadores a lo largo de generaciones, seguiríamos viviendo como en los cuentos de Dickens, empleados en las factorías de los ricos burgueses. Claro que, para gente como usted, el libre mercado es infalible. El libre mercado, lindo cuando se aplica a la enseñanza básica, a la sanidad, a los bienes y servicios básicos.

    Y ya que se vive tan mal en Cuba, y tan mal se vivía en la URSS, qué me dirá usted de Haití; de Filipinas; de Somalia; de Guatemala; de las favelas de Brasil; en fin, de medio mundo que no tiene que comer y nunca vieron el socialismo ni en pintura. Al liberalismo y a la democracia parlamentaria la cataron y se les lleva atragantando dos años, con la colaboración de gente como usted. Pero eso, claro, no importa.

    Además, ¿sabe lo que le digo? Que, independientemente de todo eso, yo creeré lo que me dé la gana, escribiré sobre lo que me dé la gana, y elogiaré a quien me venga en gana.

    Un saludo afectuoso. Y relájese, que le hará bien.

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  7. Cuando dije "el liberalismo y a la democracia parlamentaria la cataron y se les lleva atragantando dos años", quería decir DOSCIENTOS AÑOS.

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  8. Me ha sorprendido el artículo, los comentarios y tus propias respuestas. Sinceramente, no dejaré mi opinión pero sí mi felicitación por tus poemas. Bicos

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  9. Me habría encantado estar aquel domingo en la cubierta de Leganes y haber podido disfrutar de la fiestas que nuestros hermanos bolivianos y latinoamericanos organizaron aquel día.
    El comunismo al igual que el capitalismo sufre del mal de la corrupción, por supuesto, y es cierto que han existido casos como los mencionados en que se convirtieron en estados represores, pero como ideología es sin duda la única que defiende a todos. Yo no considero que todos debamos ganas exactamente lo mismo, pero tampoco estoy de acuerdo que en el capitalismo existan personas que entreguen su vida por 600 euros que tras mucho sacrificio acaban en las manos de los bancos.
    Siento que la crisis nos brindó una oportunidad que finalmente no vamos a aprovechar porque al final los que realmente manejan los hilos como siempre no son los que acuden al G20

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